Por Angie Loría | prensa@revistalevelup.com 


¿No les ha pasado que se enamoran de la energía que emana otra persona? Sí, de esa que se hace dueña de nuestros pensamientos, muchas veces es un arma silenciosa, que poco a poco desnuda nuestros sentimientos más puros. 


Supongo que así se sentía Rogue ante la personalidad del caballero de los ojos rojos, y que por mucho que intentara reprimirlo -incluso con todas sus fuerzas- hay una verdad innegable: el amor nos llega a todos tarde o temprano. 


Empecemos con esta historia


Ambos formaron parte del Equipo Azul de los X-Men; Gambit -un coqueto sin remedio- se enamoró perdidamente de la joven de ojos verdes y ella se dejó seducir por su encanto. Su romance avanzó muy lento, pues él arrastraba problemas de sus relaciones pasadas y ella, a raíz de sus poderes, no podía tocarlo ¡Debe ser horrible amar tanto a alguien e ignorar la textura de su piel, imaginar todo el tiempo a qué saben sus labios! Por esa razón, y ante una latente posibilidad de fin del mundo, se besaron. 


Hagamos un pequeño paréntesis en esta historia para apropiarnos de la situación. Es el fin del mundo y te quedan pocos minutos, entre tanta catástrofe, frente a vos está tu crush; ambos se aman aunque las palabras "te amo" no hayan sido expresadas y aunque existan dudas sobre lo que siente la otra persona. ¿Qué harías?  




Afortunadamente, se pudo detener el cataclismo; pero este primer contacto físico dejó a Gambit en coma (recordemos que los besos de Rogue matan) y a ella con serias dudas sobre sus sentimientos hacia él; pues al absorber sus recuerdos, descubrió facetas que desconocía; y todos estamos de acuerdo que el pasado de Le Diable Blanc no fue para nada lindo. 


Lo anterior, sumado al exilio de Gambito de los X-Men -por sus crímenes pasados-, dio espacio para que Rogue se enamorara de Magneto. Aunque, a decir verdad, ese amor fue algo volátil; porque al reencontrarse Gambito y Rogue se volvió a encender la llama ¿Y es que qué se puede hacer? C´est la vie, mon ami


Rogue ya había controlado sus poderes, y después de algunas terapias, también había comprendido que su amado tenía un pasado que no podía borrar; pero que también tenía todo el presente y el futuro para compartirlo con ella. 


Ambos fueron invitados a la boda de Kitty y Coloso -que por cierto se canceló- (se los contaré en otra super historia de amor) así que aprovecharon que todos sus amigos estaban presentes para contraer matrimonio. 




Tras escribir ya dos historias anteriores (Capitán América y Peggy Carter y Tony Stark y Pepper Potts) descubrí lo complejas y bien construidas que están las personalidades y los sentimientos de nuestros personajes favoritos; tanto que si les quitamos esos super poderes podrían pasar como un humano común.


Gambit y Rogue son una de mis parejas predilectas, porque además de constituir un excelente equipo, se aman desde la independencia, pues se prefieren pero no se necesitan. Podés ver la historia completa en la serie animada de los X-Men, un clásico de la cultura geek, disponible en la plataforma de Disney+


Retomo desde nuestro paréntesis ¿Qué harías? porque no es el fin del mundo, pero tampoco tenés idea de cuanto tiempo te queda. 


Este artículo representa el criterio personal de quien lo firma. Los artículos de opinión publicados no reflejan necesariamente la posición editorial de Revista Level Up.


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