Por Revista Level Up | editorial@revistalevelup.com

Quienes nacimos a finales de los 70's y mediados de los ochentas y 90's podemos considerarnos una generación privilegiada. Una generación que tras concluida la jornada laboral de ocho horas, a través de esas barbas desaliñadas y trajes ejecutivos, escondemos un niño que sus treinta y tantos años, sigue siendo fiel fan de Batman o Iron Man, sueña con viajar en el tiempo en un DeLorean, y no tiene temores a esconder su pasión por Die Hard y Super Mario. Somos parte de lo que los especialistas llaman los "kidult".



Una generación de niños que se niega a crecer. Por eso, hoy en nuestro día, queremos rendir homenaje a ese niño(a) interno que resiste a dejar sus sueños. Por ello, nuestro equipo de especialistas en Revista Level Up contestó a la pregunta ¿cuál videojuego marcó tu infancia? y ha realizado un pequeño viaje en el tiempo para recordar cuáles fueron esas entregas que dejaron huella en la memoria, y estas fueron las joyas que cada uno desempolvó:

Chrono Trigger - Gabriela Salas


Su lanzamiento fue en 1995, ya para esa época muchos estábamos sumergidos en el mundo de los videojuegos, y otros apenas empezaban. Uno como niño siempre quería explorar todo juego que caía en nuestras manos, pero siento que Chrono Trigger nos llevó a sublimar todas esas características revolucionarias: distintos finales, historias secundarias, la forma de pelea, y por qué no, hasta los gráficos, que para esa época nos sorprendían. Y tampoco dejar de lado la música que hizo que más de un niño se percatara de ello.


Siento que Chrono Trigger no solo marcó la industria de los videojuegos, sino también a todos esos niños que lo jugaron. Hizo que alguna vez deseáramos tener un valiente amigo en forma de rana, el soñar que viajábamos por el tiempo en una gran nave construida en el futuro, tener un gato llamado “Alfador” y que algún día viviríamos en el reino de “Zeal”. Si, usted jugó tanto Chrono Trigger como yo, se identificara así como yo lo hago. Es un juego que no aburre y que aunque hayan pasado años, siempre nos recordará nuestra infancia.

Gabriel Knight - Rosa Leitón


El mío siempre va a ser Gabriel Knight. Cuando vi la intro sentí que estaba creado para mí. Tenía la estética que me gustaba y el tema me encantaba y denotaba toda la fascinación de la autora por las novelas de Anne Rice y Stephen King:  la New Orleans mística de Rice y el escritor frustrado de King hicieron que enganchará desde el principio hasta el final.


Y es que Gabriel, el personaje principal de la historia fue junto con la atmósfera del juego otro de los puntos fuertes que marcaron mi infancia. Un personaje que puede como cualquiera de nosotros. Lleno de defectos, sin habilidades ni poderes especiales y con una gran pereza al levantarse de la cama, que no es el típico héroe, sino el típico vagabundo rebelde que hace las cosas por que no le quedó de otra al quedarse enredado en el asunto, dejándonos descubrir poco a poco el misterio que había detrás de cada paso que dábamos en el juego.

Mario Bros - David Arias


Sé que hubo juegos antes de este. De hecho, mis primeros juegos fueron en Atari y máquinas de fichas.  Sin embargo dos juegos que marcaron mi infancia fueron el legendario Contra y el famoso Mario Bros de Nintendo, siendo este último el que más gratos recuerdos me he regalado a lo largo de los años.


El hecho de ver movimiento, los colores, el poder controlar personajes y llevar a otro nivel mis sentidos y mis reflejos, fueron sin duda lo que me marcó y me hizo querer siempre regresar una y otra vez al viejo NES y continuar mi aventura en el mundo del fontanero. Por ello es que significa tanto para mi, porque en retrospectiva puedo decir que fue el inicio de mi etapa gamer. Ahí comenzó todo para mí en este maravilloso arte.

Johan von Lindeman - Asteroids


Asteorids de Atari fue el primer juego el cual me hizo tomar un control en mi niñez, por horas. No es que fuese bueno jugandolo, simplemente algo de esos gráficos lineales y el llegar lo más lejos posible, me hicieron querer adentrarme más en los video juegos. 


Atari fue mi primera consola. Recuerdo tener uno de esos casettes con 300 juegos o más, sin embargo Asteroids me mantenía regresando por más. Porque yo no veía los gráficos cutres, yo veía mi nave cursando el ciberespacio, y destruyendo todo los asteroides que me impedían llegar a casa. 

A Link to the past - Carlos Alvarado 


Caminar de mi casa al video en el cual jugaba grandes éxitos del SNES, se convertía en una gran aventura en mi época escolar. Me sentía como Link en el recorrido, esquivando carros y personajes imaginarios para pagar esa hora semanal de The Legend of Zelda: A Link To The Past (y pagarle extra al dueño del video para que no me borrara mi archivo al final de la sesión) y regresar la siguiente semana para mi dosis de Zelda.


A Link To The Past se convirtió en la entrega que marcó mi niñez y consolidó mi amor por los videojuegos, incluso salía a escondidas de mi casa al video cuando tenía dinero extra, simulando tener una espada y derrotando monstruos en el camino, continuando mi aventura tanto dentro como fuera de Hyrule, y no crean... esto causó problemas, no por rebeldía, sino porque era niño… y siempre que un niño hace algo a escondidas se mete en problemas, es gran parte de ser niño. Pero de algo estaba seguro y disfrutaba: Link era un niño… y si Link podía ser un héroe a su corta edad yo también quería serlo... y lo seguiré siendo.

Paul Venegas - Dragon Ball GT: Final Bout


Para muchos, el día del niño les trae recuerdos de infancia. Salir en las tardes a jugar con los amigos, subir a los arboles etc, Pero para otros, como en mi caso, solo trae recuerdos de aquellas partidas épicas de videojuegos, donde uno buscaba siempre ser el mejor del barrio, como me pasó Dragon Ball GT: Final Bout en PS1. Para mi este juego fue uno de los que más disfrute a lo largo de toda mi infancia. Empezando porque Dragon Ball estaba en su mejor época y aunque aún es un anime que deseamos ver y disfrutar. En ese momento eran otros tiempos. 


Recuerdo que destruimos los controles ya que muchas veces habían un choque de poder y el que ganaba dicho choque era el que mas rápido presionará un botón en especifico a tal punto que ese botón al poco tiempo dejaba de funcionar y había que comprar un control nuevo. Los torneos de barrio siempre eran a más no poder y si no era porque nuestros padres llegaban por nosotros creo que nunca acabarían, y aún siguen presentes en mi memoria. 

Dino Crisis - Valeria Castro


Fue el primer juego que pase. El 1 y el 2. Simplemente me encantaba todo el concepto del juego. Era como un Resident Evil. Solo que cambian los zombies por dinosaurios, más rápidos y peligrosos. El tener que andar por toda una isla resolviendo acertijos, corriendo del famoso T-Rex y los velociraptors que eran lo más tediosos, y especialmente que el juego tenía varios finales fue lo cual me motivo a pasarlo más de una vez, aún en la actualidad.


Su historia era increíblemente futurista y de verdad me ponía a pensar que pasaría con tanta tecnología que sucediera algo así. Quedar atrapado en una isla con dinosaurios ¿Cómo sobreviviría? Bueno en este caso nuestros personajes tienen armas, y pueden acceder a las instalaciones, pero... ¿y sino? ¿Sería como un Jurassic Park? Excepto que yo era una niña de 9 años. En fin siempre cada año lo vuelvo a jugar porque me trae recuerdos del primer juego que pase solita sin ayuda y sentir el mismo sentimiento cada vez, no tiene precio. Por eso es uno de los juegos que encabezan mi lista de mi infancia gamer.

Josué Araya - Legacy of Kain: Soul Reaver



El juego que marcó mi infancia fue sin dudas Soul Reaver, el primero de la saga. Recuerdo que un amigo siempre me hablaba de un juego "sul reibor" "sol reiber" o algo así; no recordaba bien el nombre y mucho menos podía pronunciarlo correctamente -no es como ahora en las escuelas que les recetan inglés a diestra y siniestra, uno se la jugaba con lo básico-, pero con tan solo 10 años me fascinaba oír de aquel misterioso juego de vampiros.


Un día en un kioskito de juegos quemados de PlayStation -sí, eran otros tiempos-, lo vi: Legacy of Kain: Soul Reaver. Ahí empezó la aventura de aquel juego de mapas confusos y puzzles de gran dificultad todo con una estética oscura y sangrienta para finalmente cerrar con una complejisima historia, que era cronológicamente perturbada por viajes temporales. Raziel en persona tomó mi alma y la dejo unida a este juego maravilloso. Por toda la eternidad. 

The Secret of Monkey Island - Pablo Vargas


Piratas que se baten en duelos de insultos, fantasmas con hambre, caníbales que cuidan su dieta, vendedores de barcos, un pollo de goma que sirve de polea, un árbol que te pide insertes el único disket que no tienes en tu colección, y un bar con perro incluido en el que sirven grog y dio vida a este proyecto. The Secret of Monkey Island es el momento cumbre de Ron Gilbert y su equipo y el mejor ejemplo del legado dejado atrás por LucasArts.


Con un guión cargado de autoparodias y referencias de la época, Ron Gilbert nos presenta la historia un protagonista impensable que sueña con ser un pirata. Un simple deseo que llevará a Guybrush Threepwood  a través de una travesía sin precedentes a lo largo del mar caribe hasta encontrarse con el temible capitán LeChuck, no sin antes disfrutar de una aventura de antología llena de humor a graneles, personajes secundarios que nunca sacarás de la mente y una isla que nunca podremos olvidar. Sus continuaciones solo harían crecer cada vez más el mito que existía detrás de esta gran saga. En pocas palabras: Una verdadera obra de arte que marcó para siempre mi infancia.

Pokémon Blue- Kevin Ruiz



Una de las franquicias que sin duda marcó mi infancia fue la de los Pocket Monsters, fue los inicios que tuve en el RPG cuando en mis años de escuela recuerdo que jugaba por montones, ahorrando para baterías y ajustando el regulador de contraste en mi Gameboy Pocket para jugar bien bajo el sol mientras me dirigía en mis aventuras por la región de Kanto en Pokémon Blue. El mundo en el que estaba inmerso era toda una aventura.


Creo que marcó mi infancia porque sin el quizás no me hubiera inmerso con más pasión en el mundo de los videojuegos. Es una referencia de lo entretenida que fue mi infancia y juventud a tal punto que hoy todavía juego. Recordar esos sonidos de Gameboy sin duda son el mejor recuerdo que mantengo hoy en día. A partir de ahí mi pasión por las aventuras fue en crecimiento. Con cada generación hemos visto el crecimiento de la franquicia pero el recuerdo siempre nos arrastra a sus inicios y nos recuerda las muchas horas que nos la pasábamos atrapando criaturas entrenándolas con esfuerzo para que fueran nuestros favoritos.

Alone in the Dark - Daniel Vargas


El PC gaming en los 90s era algo extremadamente diferente a lo que es hoy. No habían CD's, no había internet, no había multiplayer como lo conocemos hoy. Las tarjetas de video tenían un segundo plano (las pocas que existían) sobre todo si tomamos en cuenta que mi primer monitor era un CGA de 4 colores, y más bien eran las de audio las que tenían un protagonismo, ya que era la diferencia entre oír el audio del juego o una serie de beeps y pitidos del parlante integrado en la computadora.

En esos tiempos, los juegos en su mayoría cabían en algunos diskettes de dudosa procedencia, pero siendo niños, poco nos interesaban esos detalles. Además del por qué muchos de esos juegos no tenían música o sonido altamente limitado. Curiosamente eso resultó conveniente para la atmósfera la primera vez que jugué "Alone in the Dark". Aquella amalgama de polígonos combinada con imágenes hermosamente dibujadas, se conjugaban con ese silencio involuntario y extractos de las obras de H.P. Lovecraft en los libros que uno encontraba durante el juego.


Esta producción de Infrogames me introdujo al género de juegos que sigue siendo mi favorito al día de hoy: el horror. El estilo de juego no lineal se complementaba perfectamente con los monstruos, los libros malditos y el secreto de la mansión Derceto que intentábamos descubrir. Yo lo jugaba con fervor y sentía miedo, escalofríos, piel de gallina y palpitaciones fuertes... y me encantaba. Ningún juego antes me había hecho experimentar emociones tan fuertes antes. Definitivamente fue un juego que me marcó profundamente como gamer.

Xenogears - Edwin Campos


Originalmente planeado como una una secuela de Chrono Trigger y después propuesto como lo que pudo haber sido Final Fantasy VII, Xenogears es un RPG para PSX liberado en 1998 que incorpora simbolismo religioso, psicología analítica y freudiana, artes marciales, robots gigantes y ciencia ficción, cuenta con una de las tramas más interesantes, complejas y profundas que alguna vez se haya escrito para un rpg.

Todo lo anterior en conjunto con uno de los mejores OSTs jamás escritos por Yasinori Matsuda  (Compositor de Chronno Trigger/Cross y el primer Mario Party) hizo que el tiempo que pase con Xenogears a mis 15 años fuera de una de las experiencias más ilustrantes y reveladoras de mi vida, haciendo nacer en mí un interés por la filosofía y psicología que continúa hasta el día de hoy.


Si están interesados en una historia que se separe de los clásicos caballeros y dragones, y los lleve a un mundo de intriga, aventura preguntas sobre el valor de la vida humana, el destino, y la razón de la existencia misma los invito a probarlo, no se decepcionarán.

Sin duda que los años pasan pero las experiencias nunca se van de nuestro lado. Grandes juegos que dejaron huella en nuestra niñez. Clásicos inmortales que nunca olvidaremos, y que hoy rendimos homenaje. ¿Y ustedes amigos (as)? ¿Cuales juegos fueron los que marcaron su infancia?

***
Revista Level Up - Medio de comunicación costarricense especializado en cultura geek y videojuegos. Sigue lo mejor del octavo arte y lo más destacado del acontecer de la comunidad geek latinoamericana a través de nuestras redes sociales en FacebookTwitter y YouTube.

Postea un comentario

Siempre es un honor tenerte por acá. Gracias por compartir tu opinión con nosotros.

Revista Level Up
Revista Level Up