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| Por Dennis Lacayo | dlacayo@revistalevelup.com |
La secuela de Ant-Man del (2015) llegó a los cines, nuevamente bajo la dirección de Peyton Reed, con la ayuda los guionistas Chris McKenna y el mismo Paul Rudd, que interpreta a Scott Lang en el filme.
La película se sitúa después de los acontecimientos de Capitán América: Civil War, tras de haber violado los Acuerdos de Sokovia, Scott se encuentra bajo arresto domiciliario, afrontando las consecuencias de sus actos. Pero repentinamente Hope Van Dyne o Wasp, interpretada por Evangeline Lilly, hace aparición junto con Hank Pym creador del traje de Ant-Man, interpretado por Michael Douglas, solicitando su ayuda para una nueva aventura, Scott que además de su vida como superhéroe, deberá asumir su rol padre.
En esta nueva entrega se nos presenta una nueva villana con el alias de Ghost, interpretada por Hannah John-Kamen, cuyo poder le permite ser intangible, logra robar tecnología Pym, y haciendo que nuestros héroes tengan que ir tras ella para recuperar lo que les pertenece. Como es bien sabido, la película no muestra nada relativamente a los hechos de Infinity War, es una continuación directa de Civil War, o al menos se basa en esta, para poder montar uno de los argumentos de la trama.
Los posters previos al estreno ya nos habían revelado el hecho de que Janet Van Dyne haría acto de presencia en esta ocasión, bajo la actuación de la icónica actriz Michelle Pfeiffer.
En cuanto al filme, la trama es sumamente ligera para el público, sintiéndose muy lineal, ayudando al espectador, poniendo al corriente de la problemática que se nos había presentado en las películas anteriores. Pero dicha linealidad es uno de sus mayores defectos, ya que los momentos acción y comedia, son sumamente marcados, haciendo predecible cuando se aproxima una escena de comedia y una de acción, no existe una homogeneidad entre ambas, repercutiendo en que la seriedad de la trama se pierda, o el conflicto principal no tenga mayor importancia.
Esto también es debido al abuso de comedia, llegando ser incomoda o absurda, esto no significa, que no sea divertida, sino que fue poco inteligente.
Otros de los aspectos que cabe recalcar, es la actuación de Hannah John-Kamen, mostrando como hizo el personaje de Ghost como propio, sus expresiones faciales logran transmitir justamente lo que le personaje debería estar sintiendo en cada escena, pero dicha villana logra ser desechable, los guionistas tuvieron la oportunidad de darle una profundidad correcta al personaje, pero no supieron tratarla, teniendo motivaciones justificables, cae en la lista de villanos olvidables de Marvel, aclarando que el trabajo de John-Kamen fue excelente, pero a nivel de guión muy mediocre, esto es claramente notable justamente en la resolución del conflicto principal.
Por otro lado, uno de los grandes aciertos definitivamente fue la actuación de Evangeline Lilly, dotando a su personaje con un poco de humor y a la vez seriedad, siempre enfocada en ser un personaje clave para la trama, demostrando que no es la compañera de Ant-Man, sino una superheroína más.
Cabe también destacar que Rudd, que le dio el balance perfecto a Lang, siendo padre y superhéroe a la vez, es completamente tangible la relación con su hija Cassie Lang, y la preocupación que hacer las cosas bien o asumir correctamente las consecuencias de sus actos, y que no existan más repercusiones negativas. Pfeiffer tiene un desempeño sumamente destacable, pero cualquier dato se traduciría en un spoiler, esto tocará al público juzgarlo por sí mismo, pero es sumamente disfrutable ver a Janet en la pantalla grande.
Cabe también destacar que Rudd, que le dio el balance perfecto a Lang, siendo padre y superhéroe a la vez, es completamente tangible la relación con su hija Cassie Lang, y la preocupación que hacer las cosas bien o asumir correctamente las consecuencias de sus actos, y que no existan más repercusiones negativas. Pfeiffer tiene un desempeño sumamente destacable, pero cualquier dato se traduciría en un spoiler, esto tocará al público juzgarlo por sí mismo, pero es sumamente disfrutable ver a Janet en la pantalla grande.
En cuanto a efectos especiales, existe un balance correcto entre efectos prácticos y CGI, incluso las escenas en las que aparece Ghost, que se deduce llevaron un gran trabajo de edición, se aprecia la atención al detalle, no abusando del recurso del CGI. Si comparamos esta entrega con la primera, la actual llega a flaquear un poco, ya que no aporta nada nuevo o un valor agregado al personaje de Ant-Man y Wasp. La exploración del mundo cuántico no sé si realmente sea una justificación real para una entrega más de Ant-Man, pero esto se revelará en Avengers 4, en todo caso es lo que se especula.
En fin, el filme logra el objetivo de entretener al espectador, por las ocurrencias de los personajes principales y secundarios, es sumamente disfrutable, los puntos débiles no llegan a traducirse como una mala película, sino que realmente el guión pudo explotar mejor a los personajes o darles un enfoque diferente. Si es un amante de los súper héroes, sin duda pasará un buen rato.
Calificación final: Level 7 - Entretenimiento de calidad, recomendación de la casa
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