Por Luis Rodríguez | lrodriguez@revistalevelup.com

Tras los eventos del capítulo anterior, las cosas debían volver a un nivel de paz, y vemos a Mike y Eleven en el sótano, mientras que él la ayuda a limpiarse el rostro. Un momento de atracción parece darse, pero es interrumpido por Dustin quien les dice que Lucas podría estar en problemas.



Lo que no sospechaba Dustin, es que los que estaba en aprietos eran ellos mismos, porque los hombres malos estaban en camino hacia la casa de los Wheeler. Por lo que tendrán que salir volados en bicicleta coff coff E.T. aunque serán perseguidos por las camionetas del laboratorio y el Dr Brenner.



Sería aquí cuando Eleven realizaría uno de sus actos más impactantes, al golpear con su poder una de las camionetas y hacerla volar sobre ellos para al estrellarse, impedir el paso de los demás, permitiéndoles escapar seguros. Cuando por fin logran estar a salvo, al menos momentáneamente, Lucas, Eleven y Mike hacen las pases entre ellos, resaltando la amistad entre grupo.



En la comisaria de policía, Joyce y Hopper se encuentran con Jonathan y Nancy, y la reacción de la madre es por supuesto de consternación debido al arresto y la de Hopper de estupefacción al ver el armamento en la cajuela del automóvil de Jonathan. Este será el momento de la verdad para ambas parejas, que bien han lidiado el mismo problema desde ángulos distintos, Hopper y Joyce con la conspiración gubernamental, pero Jonathan y Nancy con el monstruo que hasta hace muy poco era simplemente un hombre en la pared, y por si fuera poco, Troy se unirá a la fiesta para denunciar a la niña que lo hizo orinarse y le rompió el brazo con su mente. Bingo. 



El Dr Brenner y sus secuaces regresan a la casa de los Wheeler, donde hablan con los padres de Mike sobre las actividades extra escolares que su hijo ha estado teniendo últimamente, lo cual causa gran sorpresa en ellos. Desgraciadamente para Mike y los otros niños, el Dr Brenner es un excelente manipulador y rápidamente les sacara la información de a donde pudieron haber huido.



Por suerte, la coalición de Joyce, Hopper, Jonathan y Nancy se han adelantado a los hechos y se preparan para recogerlos. Tras Hopper salvarlos, los tres grupos se reúnen finalmente en la casa de los Byers en donde Mike les explica sobre el Upside Down y Hopper confirma con Eleven la localización del portal que están buscando.



Antes de intentar cualquier cosa, deben cerciorarse de que Will y Barb todavía estén vivos, por lo que Eleven intentará comunicarse con ellos mediante el radio comunicador de los niños, pero tras varios intentos debe desistir. Es ahora una realidad que entre más ha usado ella sus poderes, más y más se va debilitando, así que para completar la tarea deberán usar la bañera, imitando el experimento hecho en el laboratorio, para poder amplificar sus poderes.



Pero existe un problema, para ello deberán crear un tanque de privación sensorial, y para poder crear uno, deberán recurrir a Dustin que en una cómica escena, le pregunta al profesor Clarke, un sábado a las 10pm, sobre esta tarea científica, por diversión. Mas, el problema es que se requiere una cantidad tan grande de sal, que deberán recurrir a la reserva existente en la Secundaria de Hawkins que es usada para abrir caminos en la heladas.



Cuando todo esta listo, tras una hermosa y merecida escena de carácter maternal entre Joyce y Eleven, la niña entra en la bañera para empezar el segundo intento de contacto. Casi en forma inmediata los efectos se comienzan a sentir, cuando las luces del gimnasio donde ubicaron la bañera comienzan a titilar. 



Ya dentro del mundo oscuro en donde encontró al Demogorgon por primera vez, la niña camina temerosa, pero decidiéndose poco a poco a hacer su proeza, con tal de encontrar a aquellos que fueron arrastrados por el monstruo.



La primera en ser encontrada es Barb, y como era predecible está muerta, consumida. La escena es tan grotesca que Eleven se asusta y comienza a gritar descontrolada, hasta que desde el exterior es Joyce quien interviene, dándole su apoyo y cariño para que se tranquilice, lo cual consiste y define una hermosa relación que la niña merecía y nunca había tenido. 



Solucionado esto, Eleven se dirige al Castillo Byers, lugar en donde Will estuvo oculto todo este tiempo y todavía vivo, pero en forma sorpresiva, antes de que puedan avanzar más, la visión se desvanece haciendo que Eleven regrese al estado despierto. Pero al menos ahora tienen un objetivo.



Hopper y Joyce se dirigen al laboratorio, pero son rápidamente descubiertos y capturados. El capítulo tiene un desenlace desafortunado cuando dentro del Castillo Byers en el Upside Down, Will a penas resistiendo es sorprendido por el Demogorgon que debe haber aprovechado la presencia de Eleven para percatarse donde se ocultaba la presa que tanto lo evitó.

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